60 años creando burbujas en la Argentina

Chandon cumple 60 años creando espumantes en la Argentina, con una mirada transgresora para atraer nuevos consumidores y generar nuevas experiencias de consumo para hacer crecer la categoría.

En 1957, Robert-Jean de Vogüé junto a Renaud Poirier, quien luego sería el primer Chef de Cave de Chandon Argentina, viajaron desde Francia para explorar nuevas zonas para el desarrollo de espumantes. 

Tras estudiar los suelos y climas de países como Estados Unidos, Perú, Brasil, Chile y la Argentina, en 1959 se decidió que, en Luján de Cuyo (Mendoza), zona desértica en la que nadie plantaba viñas, se podría elaborar espumantes de excelencia.

Así nació en 1960 Chandon Argentina, que creó la categoría Extra Brut, inédita en el mundo y la más consumida en Argentina en la actualidad, e impulsó el cultivo de Chardonnay y Pinot Noir de calidad.

Hasta ese año sólo unas pocas bodegas se dedicaban a la elaboración de espumantes con pequeños volúmenes de producción; y no había en el país plantaciones de uvas de alta calidad para espumantes. 

La búsqueda de calidad llevó a Chandon a conquistar nuevas zonas y alturas: primero fue la zona más fría y alejada de Agrelo, a 980 msnm; lo siguieron Caicayén, en el Valle de Uco, a 1.250 msnm; luego vendría Cepas del Plata con 1.550 msnm y, por último, El Espinillo a 1.650 msnm. 

En 1982 Chandon creó el primer Brut Nature del mercado, recientemente elegido como el mejor espumante argentino en los premios Decanter World Wine Awards 2020; y en 1999 lanzó Chandon 187, formato hasta entonces inédito que vino a revolucionar y descontracturar el consumo de espumantes.

En 2012 la marca presentó Chandon Délice, primer espumante dulce para tomar con hielo y un twist de sabor; y en 2015 presentó su primer Brut Nature Ros, realizado con uvas provenientes de viñedos de más de 1500 msnm y con 18 meses en contacto con levaduras. 

En 2019, lanzó Chandon Apéritif, primer espumante bitter macerado naturalmente con naranjas y especias, con el que se buscó acercar a los amantes de los aperitivos al mundo de las burbujas; que en 2021 desembarcará en el mercado europeo (Francia, Alemania y Austria).

Con una filosofía de enología artesanal, de precisión y no intervencionista, Chandon practica una viticultura a medida, con procesos de vinificación que buscan preservar siempre la frescura de la fruta.

Con 200 viticultores que cuidan sus viñedos a lo largo del año y más de 1.300 recolectores que eligen las uvas a mano en cada cosecha, sus enólogos analizan y degustan más de 700 vinos base.

Chandon incorporó la cosecha manual, la prensa neumática, los tanques de acero inoxidable y el riego por goteo a gran escala con el objetivo de minimizar la intervención del hombre y dejar que la naturaleza se exprese siempre con la máxima calidad.

La creación del Centro de Prensado de 16.000 m2 -6.5000 m cubiertos – y 16 prensas permiten procesar la uva de manera inmediata y así obtener el vino de la más alta calidad.

La bodega también desarrolla su actividad de una manera sustentable. Desde el origen de los insumos, el bienestar de los empleados, el impacto ambiental (ISO 14000, Certificación Sustentable de Bodegas de Argentina, Green boom MH) y el trabajo con las comunidades que la rodean.