Malbecino Acariciado, el blanco de Malbec de Familia Salas

Malbecino Acariciado es un vino blanco de Malbec (Blanc de Noir) de los viñedos orgánicos certificados de la bodega familiar Familia Salas.

Con Malbecino Organic Wines, línea de vinos jóvenes, frescos y de alta calidad, la bodega busca mostrar la diversidad del Malbec.

Para la elaboración de este Blanc de Noir, Ramiro Salas -winemaker de Familia Salas- trabaja con la pulpa sin pieles, como si se tratara de una uva blanca.

“Nuestra idea era demostrar al extremo toda la versatilidad del Malbec y, así, ofrecer un vino diferente, con toda la frescura de un blanco, pero con la estructura que le aportan los taninos de su ‘origen tinto’”, cuenta el winemaker.

Según Salas, la mayor complejidad que tiene la elaboración de este Blanc de Noir es evitar posibles oxidaciones, tanto en el momento del prensado como en la fermentación.

La primera añada de Malbecino Acariciado Blanc de Malbec fue en 2021, logrando un vino que superó ampliamente las expectativas de la bodega. 

Hasta el momento, se destina para este vino un 20% de la producción, alrededor de unos 5.300 litros.

“Para 2024, estimamos incrementar la producción debido a la fuerte demanda que crece cada año y nos obliga a seguir proyectando una mayor elaboración con cada añada”, agrega Salas.

Actualmente Malbecino Acariciado sólo se comercializa en el mercado local, pero con la proyección y el aumento en la producción, los objetivos a corto plazo de la bodega son abrir nuevos mercados.

“Para el mercado externo es un vino que genera curiosidad y que despierta interés por el hecho de ser elaborado con una uva tinta, con el valor agregado, en nuestro caso, de que es orgánico certificado”, afirma Salas.

Familia Salas nació en 2008, cuando la familia decidió comprar una propiedad virgen en el departamento de Maipú, Mendoza, y apostar de lleno al Malbec.

Diez años después cumplieron el sueño de elaborar sus vinos en su propia bodega orgánica, donde actualmente producen más de 40 mil botellas anuales.

“Desde el principio decidimos apostar por los vinos orgánicos, por convencimiento y por el potencial que veíamos desde la calidad que ofrecía este tipo de agricultura”, cuenta Salas.

Tanto los viñedos y la bodega, como todos sus vinos cuentan con certificación orgánica, ya que no se utilizan productos de síntesis química; además, la línea Malbecino cuenta con certificación vegana.