Abismo La Ciénaga Malbec 2018, vino ícono del Valle de Zonda
Bodega Xumek lanzó Abismo Finca La Ciénaga Malbec 2018, su nuevo vino de alta gama elaborado con uvas de los viñedos de su Finca La Ciénaga, ubicada a unos 1.470 metros de altura en el Valle de Zonda, San Juan.
“Llevamos ya más de dos décadas estudiando y experimentando los secretos del Valle de Zonda, fuimos pioneros; conocimos primero la zona baja, de suelo totalmente aluvial y, de manera simultánea, la ladera de los cerros vio modificar su escasa flora natural”, reveló el enólogo Daniel Ekkert.
“Pero, buscando la excelencia, incursionamos hace casi diez años los más de 1.400 msnm, lo más alto del Valle; allí, experiencia, clima, suelo, naturaleza en su máxima expresión, respaldarán la superlativa calidad de nuestro Abismo Malbec Single Vineyard”, agregó.
El proyecto incluye unas 150 has repartidas en tres fincas con microclimas bien distintos: Finca Santa Sylvia, emplazada a una altura de 840 msnm; Finca La Leona, en la falda de la Sierra Chica de Zonda y a una altura de 960 msnm; y Finca La Ciénaga, a 1.470 msnm.
Para elaborar este vino las uvas se cosecharon manualmente los primeros días de abril y la vinificación fue tradicional con maceración prefermentativa por más de 72 horas buscando extracciones sin presencia de alcohol; fermentación a temperaturas bajas para mantener los aromas de la fruta; y crianza de 12 meses en barricas francesas de primer uso de 400 litros.
“Siempre he trabajado ligado a la naturaleza y a lo artístico; como productores de vino apuntamos a la excelencia; soy un apasionado de esta actividad y considero que los vinos de ‘terroir’ son también un estilo de vida; sabemos que nuestros vinos transmiten un carácter y una personalidad distintiva fruto de este lugar único”, explicó Ezequiel Eskenazi Storey, dueño de Xumek.
Abismo Finca La Ciénaga Malbec 2018 es un vino “concentrado y complejo con aromas muy puros de fruta y con un gran potencial de guarda, que expresa el terroir único de nuestra finca de altura a 1.470 metros sobre el nivel del mar”, afirmaron desde la bodega.
La Finca lleva ese nombre pues las aguas de deshielo que descienden desde la cordillera de los Andes, por vías subterráneas, llegan a la Precordillera y chocan contra una falla geológica que las empuja hacia la superficie, formando una Ciénaga de 20 hectáreas.
Su suelo aluvional calcáreo y un clima fresco de altura (cuyas temperaturas promedio son 5º C más bajas que las otras fincas) permiten crear “vinos caracterizados por su frescura, salvajes y de aromas intensos”.
El Valle de Zonda es un valle sinuoso de la Pre-Cordillera de los Andes con microclimas extremos y diversos a alturas que van del los 800 a los 1.500 metros sobre el nivel del mar; allí, un terreno de unas 15.000 hectáreas, fue transformado en una reserva privada de flora y fauna donde se crían ñandúes y guanacos para su posterior reinserción en el medio natural.