Se celebra el Día mundial del Cabernet Sauvignon
El Cabernet Sauvignon, considerada la mejor cepa para vino tinto y tercera variedad más plantada en la Argentina, celebra su día en todo el mundo, como lo hace desde 2010 todos los años el último jueves de agosto.
El Cabernet Sauvignon -proveniente del cruzamiento natural entre Cabernet Franc y Sauvignon Blanc- es originario de Burdeos (Bordeaux), Francia, y base de los grandes vinos de esta región; y se adaptó muy bien en España, Portugal, Italia, California, Argentina, Chile, Sudáfrica, Nueva Zelanda y Australia.
Presente en casi todas de las provincias vitivinícolas de la Argentina, hay 14.997 hectáreas cultivadas con el varietal, 6,8% del total de vid del país, según el último informe del Departamento de Estadística y Estudios de Mercado del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV).
Caracterizado por su sabor, aroma y color, da origen a vinos con cuerpo y frutados, intensos, tánicos y muy adecuados para la guarda, exaltándose durante la crianza su intenso aroma, sabor y complejidad.
En la Argentina la variedad de terruños hace que los Cabernet Sauvignon expresen distintos matices aromáticos y en boca; así, en el país se pueden encontrar vinos de esta cepa frutados, especiados y con notas herbales, además de otros suaves o astringentes.
Entre ellos, podemos encontrar vinos como La Mascota de Mascota Vineyards, distinguido como el Mejor Vino Tinto a nivel mundial en el concurso Vinalies Internationales 2018; o el Blend de Extremos de Bodega El Esteco, que combina vinos de dos regiones inhóspitas y extremas: Cafayate (Salta) y Chañar Punco (Catamarca).
Otros buenos exponentes argentinos de la calidad que puede alcanzar el varietal son Terrazas de los Andes Single Vineyard, Cadus Tupungato Appellation, Luigi Bosca, Casarena Owen´s Vineyard y Kaiken Estate; o el flamante e innovador Aequus Nocte Blanc de Cabernet Sauvignon 2018 de Bodega Vila, elaborado como vino blanco.
Según el INV, la superficie con Cabernet Sauvignon disminuyó 15,8% en el período 2008-2017, aunque aumentó 0,6% en 2017 con relación al año anterior.
La producción total en el país de la variedad en 2017 fue de 940.297 quintales, de los cuales 38% de los vinos varietales elaborados con la cepa se exportó y 62% se comercializó en el mercado interno.
Según el INV, las exportaciones de este varietal han decrecido en volumen 18,2% pero aumentaron en valor 11,8% con respecto a 2008.